Ingredientes:
3/4 KG de champignones pequeños
2 cebollas frescas
1 cucharada sopera de salsa de tomate muy concentrada
1 ramillete de hierbas (perejil, laurel, tomillo y 1 diente de ajo)
6 cucharadas soperas de aceite
jugo de un limón grande.
2 cucharadas soperas de pasas de Corinto
1 vaso de vino blanco
1 cucharadita de cilantro
Sal y pimienta.
Preparación:
Limpiar bien los champignones con un cepillito para quitarles toda la tierra y cortarlos en láminas no muy finas.
Lavarlos en agua con unas gotas de limón y escurrirlos en seguida. En una cacerola poner el aceite a calentar, cuando esté en su punto, rehogar durante 5 minutos las cebollitas cortadas en trozos no muy pequeños, hasta que comiencen a dorarse.
Añadir entonces el vino blanco, el ramillete de hierbas, el tomate, las pasas, la pimienta molida, el cilantro (ligeramente machacado en el mortero) y el jugo de limón. Cocinar a fuego vivo con la cecerola tapada durante 5 minutos.
Añadir entonces los champignones, destapar la cacerola y dejar que se cocine por 5 minutos más, removiendo de vez en cuando. Salar, volver a remover bien y pásarlo a una ensaledera de porcelana o cristal y colocar en la heladera durante al menos 3 horas antes de servirlo. Se le puede añadir unos dados de queso feta (queso típico griego).